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Se trata de una técnica para realzar una vivienda, prepararla y decorarla para darle un aspecto más atractivo para su comercialización en el mercado inmobiliario, ya sea de alquiler o de compraventa. Esta práctica se desarrolló en Estados Unidos en los años 70 y 80 del siglo pasado, su traducción literal del inglés es: “puesta en escena de la casa” y en los últimos años ha tomado fuerza en nuestro país.
Debemos resaltar los puntos fuertes y minimizar los débiles del inmueble, no se trata de esconder los defectos sino de repararlos o convertir lo malo en algo bueno. Tampoco de decorar la casa ya que es algo muy personal y el objetivo es convertir la vivienda en un sitio acogedor y neutro en el que se sientan cómodas personas de diferentes caracteres. La idea es cautivar a los posibles compradores a la primera impresión en pocos minutos.
Cuando la oferta de inmuebles es tan abundante como sucede en estos momentos los clientes se vuelven exigentes lo que hace más difícil vender un inmueble. Pero si aplicamos esta técnica, las viviendas se convierten en lugares confortables, acogedores y lucen impecables, destacando entre la competencia existente.
Varios estudios demuestran que las viviendas que están desordenadas y sucias se ven obligadas a bajar su precio inicial hasta un 15% si quieren ser vendidas. Sin embargo, en una vivienda en la que se aplican las técnicas del Home Staging la posibilidad de negociación es inferior ya que los posibles clientes tienen menos cosas que criticar.
Numerosos portales inmobiliarios coinciden que las fotos de las casas que recurren al Home Staging reciben un 30% más de visitas. Además, las responsables de Lúmina Home Staging, empresa que se dedica a ello, afirman que los días de espera de venta se reducen desde los 130 a los 35 usando esta técnica.
FUENTE: vive.altamirasantander.com/
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